
Juande Ramos se va al Tottenham. Las libras inglesas han hecho temblar las piernas de Juande, y aquella hermosa promesa de verano de permanecer en el Sevilla este año, se ha diluido como un azucarillo...si algo aprendió Juande en su etapa como técnico del Barcelona B, es que la pela es la pela. Como sevillista de corazón me duele la espantá, pero como ciudadano y trabajador, le comprendo, si profesionalmente cree que es lo mejor para él... lo mejor es que se vaya...
un lacito, GRACIAS, y pá Londres.
La vida está llena de fenómenos ciclícos, y aunque ya muchos pensaban que el ciclo Juande en el Sevilla estaba acabado desde el verano, otros como yo confiábamos en que esta temporada fuera un bonito broche final a tantos éxitos deportivos conseguidos con él, no ha podido ser, y el mismo, y el solito, nos ha dejado claro que el ciclo estaba acabado.

Pero a veces los finales se convierten en comienzos, y personalmente pienso que este es el momento idóneo de volver a ver en el banquillo del Pizjuán a un técnico de la casa, a un producto puramente Made in Carretera de Utrera. Espero que nuestro club le de el timón de esta centenaria nave a Manolo Jiménez, un sevillista de corazón que de chavalito venía cada día desde Arahal en autobús para entrenar con el Sevilla a la ciudad deportiva, un hombre de la casa, un tío con dos cojones del que no se me olvidan sus lágrimas en el descenso a 2ª en Oviedo, un ejemplo de sevillismo para todos, que estoy seguro está perfectamente cualificado para dirigir a su Sevilla. Tiempo habrá por delante para ver sus condiciones en la élite del fútbol, su honor como sevillista está asegurado.